viernes, 13 de marzo de 2015

¡Participa en las jornadas de lucha!

El BES (Bloque de Estudiantes de Salamanca), con el apoyo de compañeras y compañeros de CEAmedias y profesores, está organizando unas jornadas de lucha con varios actos que precederán a la huelga educativa del 24M convocada para alumnado y docentes.

Os animamos a todos y todas a que participéis en los actos, así como en la huelga del 24 y en la manifestación que ese día tendrá lugar a las 12h en Plaza Mayor.

ACTOS:

El jueves 19 de Marzo a las 19 horas tendrá lugar en el salón de actos de la Facultad de Historia una asamblea abierta dirigida tanto a estudiantes como a profesorado y trabajadores ligados a la USAL. Servirá para poner en común las deficiencias de la USAL y poner en común reivindicaciones para la huelga del 24 M.

El lunes 23 de marzo a las 19:00 tendrá lugar en el aula 105 de la Facultad de Derecho el acto “La realidad educativa para profesores y estudiantes”. En él habrá ponentes del BES y de CEAmedias que hablarán sobre “La organización como método” y sobre “La LOMCE”. Asimismo, contaremos con varios profesores de Ciencias Políticas que nos darán su visión sobre “El 3+2”.

¡Ni LOMCE, ni 3+2!
Estudiante, ¡organízate y lucha!




viernes, 6 de marzo de 2015

El nuevo ataque a la Universidad Pública: el 3+2

Los y las estudiantes vemos cómo poco a poco se acotan en mayor medida nuestras posibilidades. El nuevo ataque a la Universidad Pública está representado en el llamado "Real decreto 3+2" aprobado el 30 de enero. Esta ley versa sobre la nueva estructuración de los estudios universitarios en los que el grado se verá reducido a tres años y el máster aumentado a dos.

Vamos a hacer un pequeño análisis de por qué esta medida no solo no supondrá una mejoría de las condiciones del estudiante de extracción obrera o popular, sino que lo conducirá a una situación de mayor desigualdad respecto a las clases pudientes.

Dos realidades, dos análisis

El estudiantado ya está acostumbrado a dos tipos de análisis de estas medidas que se están desarrollando en los últimos años:
Por un lado, tenemos el análisis de cifras con muchos ceros comparados con otras cifras que son producto de comparaciones de comparaciones, todo condimentado con menciones a la “Excelencia” cada dos líneas, que es el empleado por los que promulgan estas medidas intentando, en vano, defenderlas.
Por otro lado, encontramos el análisis de lo que sucede en nuestra realidad, de lo que le sucede a nuestras compañeras y compañeros, profesorado, trabajadores y trabajadoras del ámbito de la universidad etc. En definitiva, lo que sentimos y palpamos por nosotros mismos día tras día. Y nuestra realidad dista mucho de la “realidad oficial”. Y el “3+2” no hace más que abrir en mayor medida esta brecha.

El desmantelamiento de la Universidad Pública

Un error en el que se puede caer (o mejor dicho, en el que nos quieren hacer caer) es el de analizar los hechos aisladamente, es decir, pensar por separado la subida de tasas, la bajada de becas etc. Pero estas medidas no son hechos aislados, sino que se enmarcan en un continuo proceso de privatización de la Universidad Pública representado en dos vertientes: la mercantilización y la elitización.
La elitización es el proceso mediante el cual en la Universidad cada vez hay menos estudiantes, y los que no pueden acceder a ella son precisamente los que no tienen la capacidad económica suficiente para permitírselo. Esto no se da por azar o porque el gobierno y los mercados sean malos, sino porque la oligarquía necesita una mano de obra barata (por tanto, sin estudios) para incrementar sus beneficios.
La mercantilización, por otra parte, define cómo la Universidad, mediante la intervención de las empresas privadas, se proyecta para ser utilizada como otra mercancía más.
Como decíamos, ambas cosas son el resultado práctico del proceso de privatización que está sufriendo la Universidad Pública, hecho que beneficiaría a la oligarquía ya que gracias a él conseguiría una ganancia mayor extraída por la liberación de este sector público.

El 3+2 o todavía más elitización

El 3+2 está claramente encaminado hacia el primer punto, la elitización. Hemos de remarcar que las críticas no se producen al 3+2 en abstracto: en un hipotético caso en el que la educación fuera gratuita, es posible que dos años de especialización resulten adecuados. Pero lamentablemente, esa no es la situación real de España, ni mucho menos.
Con esta medida se obligará al estudiante a cursar también el máster para encontrarse en igualdad de condiciones en la competitividad laboral. Pero el problema es que no todo el alumnado se puede pagar el máster, debido a los precios desorbitados que tiene. Por poner un ejemplo de la Universidad de Salamanca, el precio por crédito de la mayoría de los másteres que no habilitan para el ejercicio de actividades profesionales reguladas, es decir, de másteres de investigación en su mayoría, es de 41,58 €, lo que, multiplicado por los 60 créditos que son actualmente el máster, son 2494,80 €, ¡en primera matrícula!1. Ni imaginemos a cuánto puede ascender dos años de máster en vez de uno.
Evidentemente, tres años de carrera serían más baratos que los cuatro actuales. Pero la utilización de este argumento por parte de la oligarquía es el culmen de la incoherencia de sus políticas, que sobrepasan el insulto: el grado será más “barato”, pero la educación universitaria estará mucho más segregada y será de peor calidad, unido a que habrá unos alumnos de “élite” que se puedan pagar el máster y otros “de menor nivel”.
Otro de los argumentos empleados es que en la mayoría de los países de Europa existe dicho 3+2. Pero esta afirmación es solamente verdadera en parte, ya que, aunque es cierto que bastantes países tienen el 3+2 y el modelo del 4+1 de España solo lo tienen otros tres países, también existen los que tienen 4+2 o los que siguen un modelo mixto.2 Por tanto, el panorama no es tan homogéneo como se quiere presentar. Además, no hay que pasar por alto que muchos de los países que no tienen el 3+2 se encuentran en tal circunstancia debido a la lucha estudiantil que los y las estudiantes llevaron a cabo defendiendo sus derechos.
Por otra parte, la reducción de estudiantes posiblemente podría servir también como pretexto para la reducción de trabajadores del ámbito de la Universidad, por tanto, esta medida podría tener también un gran impacto para el profesorado.
En definitiva, se conseguirá una educación mucho más “selectiva” (véase “discriminatoria”) a la cual solamente los más “sobresalientes” (véase “los que tienen dinero”) podrán acceder, colocando a España como uno de los países de Europa “con más excelencia” (véase “con más desigualdades”).

El proceso de privatización de la Universidad

Como decíamos, si analizamos detenidamente los cambios que se han ido implantando en la Universidad, vemos que no representan hechos aislados, sino que responden a dichas dos vertientes, elitización y mercantilización. Además, la situación en España es más dramática que la de otros países de alrededor, en los que la lucha estudiantil ha conseguido hacer reales sus derechos.
Primero, en España se han incrementado las tasas de las carreras de cuatro años, obligando a los hijos e hijas de trabajadores a no poder cursar carreras universitarias y por tanto a continuar los estudios por otras ramas (como el FP) o, en el peor y más común de los casos, a abandonar los estudios.
Luego, se llevó a cabo una reducción de las becas. Como siempre, en un primer momento el ministro Wert negó que tal hecho sucediera, para luego tener que admitir ante la evidencia que sí las habían bajado.
Y aquí tenemos el resultado: en Castilla y León, la cuantía de las becas ha experimentado una bajada de 795,96 euros, un 22,7% menos, en los últimos dos cursos. Un estudiante recibía de media en 2011-12 3.495,41 euros; en 2014 2.699,45.3 Además hay que contar con que se trata de una media, esto es, la familia de un estudiante puede cobrar 450 euros y la de otro 3000.
Una vez subidas las tasas y reducidas las becas, se propone el 3+2, que terminará por incrementar más las diferencias entre los que pueden pagar más y los que no pueden.
Por último, hay que señalar que esto no se trata de un hecho aislado de España, sino que se enmarca en el proyecto político de la Unión Europea en el ámbito de la enseñanza, representado en la Universidad en el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), el Plan Bolonia y el plan EU2015. Estos planes, como vemos en nuestra realidad, también responden a esta intención de privatización y nos demuestran cómo la Unión Europea no defiende los intereses de los trabajadores y las clases populares, sino de los grandes empresarios de los distintos países.

¿Qué hemos de hacer?

Ante esta medida y otras encaminadas a reducir el número de estudiantes de extracción obrera y popular debemos responder con contundencia, llevando a cabo huelgas, manifiestos o cualquier otro método de lucha que esté a nuestro alcance, actos que son absolutamente necesarios para mostrar a la oligarquía que, pese a que los y las estudiantes actualmente estamos, por desgracia, no tan bien organizados como deberíamos, somos capaces de presentarles cara y que son necesarios para demostrar que únicamente con la organización, el trabajo diario y el compromiso se pueden mejorar nuestras condiciones.
Desde el Bloque de Estudiantes de Salamanca (BES) vamos a defender consecuente e ininterrumpidamente los derechos de los estudiantes de Salamanca. Por eso llamamos a todo el estudiantado a que participe con nosotros y nosotras, tanto en nuestros actos como en nuestras reuniones y luchando codo con codo por no solo mantener nuestros derechos, sino también por intentar hacerlos cada vez más reales.

Ante sus ataques, organización estudiantil.
Por una universidad pública, gratuita y al servicio del pueblo trabajador.

Bloque de Estudiantes de Salamanca.

Notas: